Reseña: Cruzando los límites

¡Deja de pensar e intentar controlar todo lo que contiene el universo! A veces ese universo se reduce solo a ti.

Título: Cruzando los límites (CLL#1).

Escritora: María Martínez.

Número de páginas: 416.

Editorial: Ediciones Urano (Titania).

Sinopsis: Savannah no entiende por qué todo el mundo se empeña en que vuelva con Brian. ¿A nadie le importa la razón por la que rompieron? Quizá debería hacerse la tonta y aceptar que su perfecto, brillante y universitario novio se acostó con otra chica en el asiento trasero de su coche, destrozando su pequeño universo y sus planes de futuro.

Caleb es todo lo contrario a Brian, alguien poco recomendable. Es insolente, descarado y temperamental, y posee una mirada capaz de provocar incendios. Savannah conoce el peligro que supone acercarse a él. Sin embargo, ahora que el chico ha regresado a la ciudad, lo que hace unos años solo era un amor platónico e infantil amenaza con transformarse en algo muy real… y convertir su último verano, antes de ir a la universidad, en el más excitante de toda su vida.

Opinión personal: Lamento haber estado ausente durante un largo tiempo, pero no voy a mentirles, estaba pasando por una etapa en la que no me apetecía leer demasiado y tenía una pequeña crisis existencial, pero creo que me he centrado al fin. Para superar mi bloqueo lector, se me ocurrió elegir este libro que ya me habían recomendado tanto. Conoceremos a Savannah, quién parece tener una vida perfecta. Tiene unos padres ricos, vive en Port Pleasant en una casa en la colina, muchas amigas, un novio popular y perfecto, además de un futuro prometedor en la universidad de Columbia. Todo cambia cuando Brian decide engañarla en la parte trasera de su auto con otra chica. Las personas que la rodeaban no paraban de pedirle que reconsiderara lo que había hecho y perdonara a su ex novio, excepto su mejor amiga Cassie.

También se nos presenta a Caleb, un joven que ha tenido que sufrir mucho a lo largo de su corta vida, con un padre abusivo que no paraba de lastimar y agredir a su familia, hasta que un día él decidió ponerle un alto, por lo que terminó en prisión una temporada y decidió dejar el barrio donde había crecido para tratar de empezar de nuevo con su tío en otra ciudad. Tras la inesperada muerte de su hermano decide regresar al pueblo dónde creció para asistir al funeral. Savannah decide ir a despedirse por última vez de Dylan ya que era su tutor y buen amigo, aún sin poder creer que no volvería a verlo. Su mirada se fija en Caleb, su amor platónico del instituto y del que tantos rumores se oyen. Tras una serie de encuentros entre ambos, trataran de no seguir cruzando más límites de los que puedan resistir.

Los personajes me han parecido bastante normales. Tenemos el caso ya bastante visto dónde hay un chico malo con un pasado oscuro que tiene una serie de conflictos emocionales y a una protagonista que se enamora perdidamente de él a pesar de las miles de advertencias que le indican que no debería hacerlo. Los secundarios me han gustado porque les vi su toque de profundidad y nos encontramos con sus propias historias. La trama tiene un buen desarrollo y en la parte final hay un giro que sin duda alguna redirige el rumbo que toma la novela.

La lectura es bastante amena debido a la pluma de la autora. Debo aceptar que pese a los tópicos y el cliché que parece destilar toda la obra, me ha gustado bastante y me ha resultado muy entretenida. Porque hay cosas que, si están bien hechas, aunque ya las hayamos leído cien veces antes, seguimos disfrutando. Sin contar que disfruto de este tipo de lecturas y últimamente he andado un poco cursi. Hay que recordar desde luego que no todas las actitudes presentadas en la relación de la pareja y en los propios personajes que se muestran en la lectura están bien, porque el machismo siempre está al acecho. A pesar de eso, es una lectura que puede hacernos pasar un buen rato y quise continuar con el segundo libro de la serie, del que espero publicar la reseña esta semana porque me gustó mucho más que este.

El mensaje que nos deja es que debemos olvidarnos de los prejuicios, porque en efecto, estos generan varios conflictos y malos entendidos. Tenemos que recordar que al final todos somos seres humanos, por lo que merecemos ser tratados con dignidad, equidad y respeto. A veces solo tenemos que cruzar los límites de nuestra zona de confort para acabar siendo sorprendidos con todas las cosas maravillosas que la vida puede ofrecernos.  

¿Ya lo han leído? ¿Qué les pareció? ¡No olviden comentar!

¡Hasta la próxima reseña!

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